Pasé el mejor Día de San Valentín aquí en España. Al principio, tuvimos planes de ir al cine y luego ir al estadio de Sevilla FC para ver si habría billetes baratos antes del partido. Luego por la noche, quedaríamos en un piso alquilado para una fiesta de pijamas. Pero! Cuando fuimos el viernes a Costco con nuestras amigos, ellos nos dijeron que tuvieron planes de ir a Aracena para ver a unas cuevas que están allí. Nos invitaron a acompañarlos y entonces cambiábamos de planes y fuimos a Aracena para pasar el día.
Había un autobús que salía de Sevilla a las 9 de la mañana. Nos reunimos a las 8:30. Por supuesto los chicos llegaron tarde, a como las 8:50. No pudimos comprar nuestras billetes antes de que llegaron los chicos porque no pudimos recordar que se llama el pueblo. Entonces cuando se llegaron, corrimos a la ventanilla para comprarlos, pero solo 4 pudieron comprarlos antes de que nos dijo que estaba demasiada tarde y no pudo vender más billetes porque era las 9. Yo con mis 3 amigas no tuvimos billetes. Una chica estaba hablando con la señora y como tenía un acento difícil pensó que ella nos dijo que debíamos ir para ver si el autobús todavía estaba allí abajo. Entonces corríamos abajo para encontrar el autobús. Todavía estaba allí y las personas estaban embarcándose. Corríamos arriba otra vez para hablar otra vez con la señora. Cuando llegábamos a la ventanilla otra vez, nos preguntó que estábamos haciendo porque pudiéramos comprar los billetes. Entonces entendí lo que nos estaba diciendo y entonces corríamos otra vez abajo. Un amigo estaba hablando con el conductor y pidiendo que nos espera. Pero llegábamos a tiempo y comprábamos los billetes. Pienso que tuvimos los últimos asientos en el autobús.
Entonces estábamos en ruta a Aracena. Está como uno o dos horas de Sevilla. Viajábamos por colinas verdes con muchos árboles y pensé en Oregón. Cuando llegamos en Aracena, había una parada de autobús y como era temprano había personas tomando desayuno y café. Decidimos tomar unos churros con chocolate antes de empezar nuestra aventura. Fue la mejor decisión del día. Pienso que estos fueron los mejores churros con chocolate que he tomado hasta hoy en día. Estaban bastante baratos y recibimos muchos churros con nuestro chocolate. Muy rico muy rico. Y nos dio la oportunidad de conocer a nuestros amigos nuevos un poquito más.
De la parada, puedes ver un castillo antiguo sobre una colina arribe de la ciudad. Decidimos empezar allí. Caminábamos por el pueblo y subimos la colina. Era un día nublado pero pienso que era muy bonito. Tomábamos muchas fotos allí y puedes entrar en la capilla del castillo pero el resto está cerrado. Pasamos unos horas allí descubriendo lo que había allí.
Luego fuimos a la parte más turística de la ciudad, donde están las cuevas, o Las Grutas como se llaman. Había mucha gente allí. Compramos los billetes para la próxima visita que estaba en unas horas. Entonces fuimos a comer nuestros bocadillos al lado de un lugar con muchas tablas de lavar y un estanque pequeña. Había mucho viento y este lugar bloqueó la mayoría del viento. Explorábamos un poquito más de la ciudad antes de regresar a las cuevas. Es un pueblo pequeño y muy tranquilo y callado. No había personas en las calles, más que las turistas.
Las Grutas vale la pena visitar. Tuvimos que ir con un grupo y una guía, no pudimos explorarlas solos. También fue "prohibido" sacar fotos. Solo sacábamos unos... Pero estas cuevas eran maravillosas. Me encantó los lagos pequeños que habían formado por dentro. Y habían puesto varios luces en el agua y también en las estalagmitas y estalactitas, dándolos un color maravilloso. El tour tardó como 45 minutos, una hora tal vez. Y nosotros quedábamos al final del grupo, caminando despacio.
Cuando salimos, tuvimos tiempo para explorar un poco más antes de regresar a Sevilla. Paseábamos por las calles, encontrábamos un parque, unos túneles, unos tiendas, unos plazas. Y regresábamos a Sevilla.
Tres de mis amigas y yo todavía queríamos quedar en un lugar para tender la fiesta de pijama como no podemos pasar la noche juntas en uno de nuestras casas. Pero unos días antes trabamos de reservar un piso en airbnb pero se rechazó a la solicitud. Habíamos tratado de conseguir otro, pero ya era demasiado tarde. Entonces después de despedir a los chicos en Sevilla, corríamos a nuestras casas para buscar a un hotel o hostal en que podíamos dormir por sola una noche. Por fin, encontrábamos un hostal.
Cenábamos muy rápido y comprábamos unos tentempiés y dulces y fuimos al hostal. Era una noche tan divertida e inolvidable. La mayoría de las personas estaban afueras en la ciudad entonces no había nadie adentro. Empezábamos en el patio del hostal, pero empezó a llover. Entonce fuimos adentro a la cocina. No había nadie allí entonces sentábamos en la mesa, y comíamos los tentempiés y nos charlábamos por horas. Fue exactamente lo que necesité. Después me sentí renovada y mejor con mi alma. No sé como describirlo. No más que fue una noche extraordinaria y me hacía recordar de que soy tan bendecida estar aquí con mis amigas nuevas.
Al final, el tiempo de lo disfrutado es el único y verdadero tiempo vivido.
(Jorge Bucay)